Esperanza para tratar el autismo
Una droga eficaz para el tratamiento de la hipertensión se muestra prometedora para atacar síntomas básicos del autismo como el comportamiento repetitivo, agilizando ciertas áreas del cerebro y facilitando la interacción social.
Un grupo de científicos de la Universidad de Missouri encontró que un medicamento para la hipertensión ayudaría a tratar los problemas básicos asociados con el autismo: la dificultad de desarrollar habilidades lingüísticas y de socialización, así como el comportamiento repetitivo.
Se trata del propranolol, que reduce los efectos de las hormonas del estrés, aliviando así la tensión y controlando la presión arterial. Sin embargo, también tiene el beneficio favorecer el funcionamiento adecuado del cerebro.
"El estrés impide que el cerebro procese adecuadamente datos del exterior, y el cerebro del autista tiene esa misma dificultad, aun sin la presencia de estrés", explica David Beversdorf, del Centro Thompson para el Autismo y las Discapacidades Mentales de la Universidad de Missouri.
Ya en algunos estudios se había observado que el propranolol ayudaba a pacientes autistas a resolver pequeños problemas lingüísticos, y a asociar mejor las palabras con sus significados, además de facilitar la interacción social. Pero ahora se considera que puede tener una acción de mayor espectro.
Este hallazgo es clave ya que la mayoría de los medicamentos dirigidos a estos pacientes se centran en el tratamiento de problemas psiquiátricos como la agresividad, la ansiedad y el comportamiento obsesivo.
El siguiente paso, explica Beversdorf, es llevar a cabo estudios clínicos para saber si los efectos de este medicamento son duraderos.
Más información:
-
12 señales de alerta del autismo
-
10 formas de tener el estrés bajo control
-
Autismo, más ligado al ambiente que a los genes
© 2024 Pan-American Life