¿Pizza para el desayuno?

La pizza es un alimento con alto contenido calórico y, en muchos casos, es considerada como comida chatarra. Sin embargo, esto depende de cómo se elabore, los ingredientes que se utilizan y la frecuencia con que se consume.  Ahora, una nutricionista señala que comer pizza para el desayuno en realidad puede ser más saludable comparándola con un tazón de cereal habitual.

"Tal vez se sorprendan al descubrir que una porción promedio de pizza y un tazón de cereal con leche entera contienen casi la misma cantidad de calorías, Sin embargo, la pizza contiene un golpe de proteína mucho más grande, que lo mantendrá satisfecho y aumentará la saciedad durante toda la mañana", dijo la nutricionista Chelsey Amer al sitio web de alimentos The Daily Meal.

La pizza no es la opción más nutritiva para el desayuno, pero es una comida más equilibrada cuando se la compara con las opciones de los cereales en Estados Unidos que rara vez contienen proteínas, grasas saludables o cualquier otra cosa que no sean cucharadas de azúcar, destacó Amer.

Además, uno de los principales ingredientes de la pizza es el queso, que también tiene sus propios beneficios para la salud. Un análisis reciente realizado por investigadores de China y Holanda reveló que comer pequeñas cantidades de queso al día reduce el riesgo de desarrollar enfermedades coronarias.

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Desayuno saludable

Sin embargo, otros expertos en dietas señalaron que los cereales son una opción de desayuno más saludable que la pizza. El primer paso, y el más importante, es elegir una buena caja de cereal que contenga fibra, lo que reduce el colesterol y controla el azúcar en la sangre. La proporción recomendada es de menos de 3 gramos de azúcar y más de 6 gramos de fibra.

Además, los cereales se pueden combinar con complementos saludables, como bayas, manzanas en rodajas, plátanos picados, nueces, semillas de chia y yogur.

Comer un plato de cereal saludable es una mejor opción de desayuno, pero es bueno saber que la pizza puede servir como sustituto en un apuro.

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Orígenes

En un principio, en Italia y Grecia, la pizza era un alimento nutritivo y sano, que sólo contenía harina, aceite de oliva y tomate. Pero con el tiempo se le fueron agregando combinaciones de ingredientes que la convirtieron en una opción repleta de calorías.

En estos días, una sola porción de pizza puede llegar a superar las 300 calorías, que representan alrededor de 1/8 de las calorías totales diarias que se deben ingerir para tener un peso adecuado. También pueden contener hasta 800 mg de sodio, que representa un tercio de lo recomendable por día, según la Guías Alimentarias de Estados Unidos .

Los agregados de la pizza pueden afectar significativamente su valor nutricional. Ingredientes tales como peperoni, salchichas y queso extra pueden aumentar la grasa saturada, el sodio y las calorías. Si eliges prepararla en casa tendrás un mayor control y podrás utilizar ingredientes más sanos, nutritivos y menos cargados de calorías, sodio y grasa.