Clinton, Cruz, Sanders y Trump: ¿estarían sanos para gobernar?

HILLARY CLINTON

En julio del 2015, la doctora Lisa Bardack, del Mount Kisco Medical de Nueva York, dio a conocer una carta en la que informaba que la pre candidata demócrata a la presidencia Hillary Clinton estaba en perfectas condiciones de salud.

La carta decía que "la Sra. Clinton es una mujer saludable de 67 años, cuyas condiciones médicas actuales incluyen hipotiroidismo y alergia estacional al pólen".

Entre las situaciones médicas de Clinton que hicieron noticia están: dos trombosis venosas, en 1998 y 2009, una fractura de codo en 2009 y una contusión en 2012. Esto último fue a causa de un virus estomacal que contrajo en uno de sus viajes como secretaria de Estado, por el cual sufrió un mareo.

La presión de Hillary es de 100/65 y su ritmo cardíaco de 72 pulsaciones por minuto, indica la carta. La medida del nivel de colesterol al momento del examen médico fue de 195, y los triglicéridos de 69. 

El historial familiar indica que Clinton puede ser longeva, ya que su padre falleció pasados los 80 años y su madre después de los 90.

TED CRUZ

Hasta el momento no se conoce una carta oficial que haga pública la condición de salud del pre candidato republicano a la presidencia Ted Cruz.

BERNIE SANDERS

A fines de enero, el doctor Brian P. Monahan, quien es médico de cabecera de Sanders desde hace 20 años, informó que el pre candidato demócrata a la presidencia, de 74 años, está en "excelente condición de salud".

Su historial médico incluye: diverticulitis, hernias y quistes en las cuerdas vocales. Según indica el último examen médico que se hizo en noviembre de 2015, Sanders mide 6 pies y pesa 179 libras. Su nivel de colesterol es de 196.

Sanders tiene un historial de diverticulitis y un trastorno en la glándula tiroides por la cual ha realizado un tratamiento de reemplazo hormonal.

Este doctor no confirmó, como se dijo, que aún estuviera siendo tratado por gota.

DONALD TRUMP

En diciembre del 2015, el doctor Harold Bornstein dio a conocer una carta en la que aseguró que el pre candidato republicano a la presidencia no ha tenido "episodios médicos significativos" y que su presión arterial es, a los 69 años, el momento de la evaluación médica, "sorprendentemente excelente", de 110/65. 

Bornstein, quien es médico internista y gastroenterólogo en el Lenox Hill Hospital de Nueva York, ha atendido a Trump por más de 25 años.

Aunque al parecer su historial clínico es impecable, Trump ha sido criticado por no hacer ejercicio regularmente, y por seguir una dieta alta en grasas y carbohidratos.