Carne roja aumenta el riesgo de diabetes gestacional
Las mujeres que planean embarazarse o que ya están embarazadas deberían limitar el consumo de carne roja y proteína animal para disminuir la posibilidad de padecer diabetes mellitus gestacional (DMG), según datos del Nurses’ Health Study II referidos en un artículo de Philippa Middleton, investigadora de la Universidad del Instituto Robinson de Universidad de Adelaida, Australia.
En el artículo publicado en la revista científica Evidence-Based Nursing, Middleton señala que la última investigación internacional sobre diabetes gestacional demuestra que las mujeres que comen una gran cantidad de carnes rojas y procesadas, incluso antes de quedar embarazadas, tienen un riesgo significativo de desarrollar la enfermedad.
"Ha habido varios informes que vinculan la carne roja con un mayor riesgo de diabetes tipo 2, y ahora el trabajo de varios equipos de investigación de todo el mundo está mostrando este relación para la diabetes durante el embarazo", advirtió la especialista.
Señaló que si bien la noticia es alarmante, también hay algunos aspectos positivos, toda vez que las últimas investigaciones en Estados Unidos han demostrado que el consumo de pescado y aves de corral no aumenta el riesgo de diabetes gestacional y consumir más verduras se asoció con una riesgo menor. Por ejemplo, una porción de nueces por día reduciría el riesgo de diabetes gestacional en un 40%.
Con base en la evidencia actual, las mujeres embarazadas o que planean quedarse embarazadas deberían considerar comer más proteínas vegetales y frutos secos, y sustituir la carne roja con el pescado y las aves de corral, consideró.
Frutos secos y diabetes gestacional
El estudio realizado por el Programa de investigación intramuros de Instituto Nacional de Salud infantil y desarrollo humano Eunice Kennedy y los Institutos de Salud de Estados Unidos, encabezado por el Dr. Wei Bao sobre la relación entre la ingesta de proteínas y la diabetes gestacional, concluyó que una dieta rica en proteínas vegetales, específicamente frutos secos, en lugar de una dieta rica en grasas animales, estaba asociada con un menor riesgo de padecer la enfermedad.
Los investigadores analizaron los cuestionarios de alimentación de 21,457 mujeres con parto único, incluyendo 870 pacientes con diagnóstico de diabetes gestacional. Después de una serie de ajuste de edades, índice de masa corporal y factores de dieta (incluyendo la ingesta de grasa y colesterol) lograron establecer que el alto consumo de proteínas de la carne roja estaba asociado con un incremento en el riesgo de padecer diabetes gestacional, mientras que el aumento en el consumo de proteínas de origen vegetal estaba asociado con una reducción significativa de padecer este tipo de diabetes.
Sustituir una porción de carne roja al día por una fuente de proteínas más saludable como el pollo estuvó asociada con una disminución de 29% de riesgo, 33% por pescado, 52% por nueces y 33% por legumbres. Estudios previos han sugerido que las dietas altas en proteína pueden afectar adversamente a las homeostasis de la glucosa.
Diabetes gestacional
La Asociación Americana de Diabetes (ADA, por sus siglas en inglés) refiere que se dice que una mujer embarazada tiene diabetes gestacional si tienen un nivel alto de glucosa en la sangre durante el embarazo. Se calcula que la diabetes gestacional afecta 18% de los embarazos.
La diabetes gestacional afecta a la madre a finales del embarazo, después de que se ha formado el cuerpo del bebé, y mientras el bebé todavía está creciendo. Debido a esto, la diabetes gestacional no causa el tipo de defectos de nacimiento que a veces se presentan en bebés cuyas madres tenían diabetes antes del embarazo.
Sin embargo, la diabetes gestacional no tratada o mal controlada puede hacerle daño a su bebé. Cuando usted tiene diabetes gestacional, el páncreas funciona horas adicionales para producir insulina, pero la insulina no baja el nivel de glucosa de la sangre. Aunque la insulina no cruza la placenta, la glucosa y otros nutrientes sí lo hacen. La glucosa adicional en la sangre atraviesa la placenta, lo que hace que el bebé tenga un alto nivel de glucosa. Esto hace que el páncreas del bebé produzca más insulina para eliminar la glucosa en la sangre. Ya que, el bebé está recibiendo más energía de la que necesita para crecer y desarrollarse. La energía adicional se almacena como grasa.
Esto puede producir macrosomía o un bebé "gordo". Los bebés con macrosomía enfrentan problemas propios de salud, entre ellos daño en los hombros durante el parto. Debido a la insulina adicional producida por el páncreas del bebé, los recién nacidos pueden tener un nivel de glucosa muy bajo al nacer y también corren mayor riesgo de tener problemas respiratorios. Los bebés con exceso de insulina corren mayor riesgo de ser obesos durante su niñez y tener diabetes de tipo 2 de adultos.
Todas las mujeres embarazadas deben recibir una prueba oral de tolerancia a la glucosa entre las semanas 24 y 28 del embarazo para detectar la afección.
Cifras y datos sobre la diabetes
La diabetes se ha convertido en una epidemia que afecta a casi 350 millones de personas en todo el mundo según cifras de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
El Diabetes Atlas de la Federación Internacional de Diabetes (FID 2011) calcula que hay unos 490,000 niños de menos de 15 años con diabetes tipo 1 en el mundo, de dicha cantidad se estima que hay entre 80 y 100 mil con necesidad urgente de asistencia.
Según las estadísticas de la Asociación Americana de Diabetes (ADA, por sus siglas en inglés), unos 22.3 millones de personas en los Estados Unidos (hombres, mujeres y niños) han sido diagnosticados con diabetes, es decir, casi el 7% de la población total y 5 millones más que en 2007. Se estima que 6 millones de personas tienen diabetes pero no lo saben y se prevé que unas 44 millones de personas desarrollen la enfermedad en los próximos 15 años.
Para la ADA, las complicaciones de la diabetes representan una carga del cinco al diez por ciento del presupuesto de salud de un país. En el 2012, en los Estados Unidos se gastaron 245 mil millones de dólares en costos médicos directos, lo que incluye la atención hospitalaria y de emergencias, las consultas médicas y los fármacos. De esa cantidad, 69 mil millones de dólares representan los costos indirectos, lo que incluye una menor productividad en el trabajo o productividad perdida, así como la muerte prematura.
La ADA indica que es la cuarta causa de muerte a nivel mundial y que las personas diagnosticadas con diabetes tipo 2 morirán de 5 a 10 años antes que las personas sin diabetes debido a enfermedades cardiovasculares.
Recuerda que bajo la normativa de la Ley de Cuidado de Salud a Bajo no importa la edad ni la condición médica que tengas, uno de los mandatos prohíbe a las aseguradoras discriminar a personas con condiciones preexistentes como la diabetes y elevar las primas en caso de enfermedad. Si tienes dudas sobre los cambios bajo la Ley de Cuidado de Salud a Bajo Precio, visita el Centro de Seguros Médicos, en donde hallarás respuestas simples a tus preguntas.
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