¿Es malo cruzar las piernas?
Existen muchas teorías sobre sentarse con las piernas cruzadas. Algunas versiones apuntan a que aumentaría la presión sanguínea, predispondría a tener várices, así como daños en los nervios, pero, ¿qué tanto hay de cierto?
Cruzar las piernas es una de las posturas que más personas realizan cuando están sentadas. No obstante, existen versiones que indican a que hacerlo traería consecuencias a la salud. Una de ellas tiene que ver con el aumento de la presión de sangre en el cuerpo, tal como señalaron siete estudios realizados en el 2010.
Según las investigaciones al superponer una pierna encima de otra se manda sangre de las piernas al tórax, que se traduce en más sangre enviada desde el corazón y en consecuencia hay incremento de presión.
Aunque esto suele suceder, una de las investigaciones realizada en una clínica especializada en hipertensión en Estambul, Turquía, encontró que no representa algo grave para el organismo, ya que al cabo de tres minutos tras descruzar las piernas la presión recupera sus niveles normales.
Sin embargo, habría una excepción. Y es que algunos pacientes con alto riesgo de presentar coágulos sanguíneos se les recomienda no cruzar las piernas por largos periodos de tiempo, pues al existir poco flujo de sangre incrementa el riesgo de sufrir una trombosis venosa profunda.
Otra teoría apunta a que dicha postura estimularía la aparición de varices. Sobre esto, aún es un misterio descifrar todas las razones por las que en algunas personas aparecen con más facilidad las várices que en otras por las que no queda del todo claro si cruzar las piernas contribuye o no.
De acuerdo con la Biblioteca Nacional de Medicina, en los vasos sanguíneos existen válvulas que evitan que la sangre circule en la dirección errónea. Si esas válvulas se debilitan es probable que la sangre se estanque y por consecuencia se de origen a las várices. Más que la postura, la genética jugaría un rol más importante.
Lo que es un hecho, es que al pasar mucho tiempo con esta postura al final se puede dormir un pie o una pierna. Esto se debe a que se ejerce presión en el nervio peroneo que está justo detrás de la rodilla, no obstante, se piensa que podría causar una enfermedad conocida como parálisis del nervio peroneo con incapacidad de levantar parte del pie y dedos.
Al respecto, investigadores de Corea del Sur se dieron a la tarea de investigar las posibles causas de esta afección por lo que tomaron notas y comportamientos en varios pacientes, y curiosamente nunca destacaron sentarse con las piernas cruzadas.
El lado positivo
Pese a que en ciertos casos no se recomienda cruzar las piernas, ya que además interferiría con la postura corporal, también existen buenas noticias.
Una investigación del Centro Médico de Rotterdam reveló, tras revisar la manera de sentarse de hombres y mujeres que al cruzar tales extremidades incrementa el alargamiento del músculo piriforme, ubicado debajo de la cadera, en un 11% en comparación a sentarse con las piernas rectas.
Esto se podría traducir en mayor estabilidad de las articulaciones de la pelvis, de la misma forma que cuando se tensan los músculos del abdomen.
En resumen, si eres de los que están todo el tiempo en esa posición las probabilidades de sufrir algún daño a la salud son muy bajas, salvo la excepción de presentar coágulos sanguíneos.
Mientras tanto, lo único de lo que deberías preocuparte es de evitar que se duerman las piernas, ya que el hormigueo y la sensación de no sentir las piernas al caminar es algo que no se le desea a nadie.
Más para leer:
© 2024 Pan-American Life