Fey: ¿Cómo afectaría su tercer divorcio en su salud?

Ante un divorcio, el siguiente paso que la cantante Fey deberá tomar es tratar de darle la vuelta a la página; sin embargo, mientras eso llega es posible que pase por momentos difíciles. Uno de ellos es la depresión.

De acuerdo con la Academia Americana de Médicos de Familia, frente a esta situación suele existir una gran superposición entre los síntomas del duelo por pérdida y la depresión. Seguramente la artista podría manifestar varias emociones como ira, ansiedad, ataques de pánico, miedo, culpa, confusión, negación, insomnio, irritabilidad, soledad, falta de aturdimiento, tristeza y shock.

Además, es importante que la artista de 40 años ponga atención en su comportamiento, pues se han encontrado varios casos en donde, ante una ruptura, la depresión ha derivado en los trastornos de alimentación o en adicciones.

Tal es la historia de Demi Moore. Después de separarse de Ashton Kutcher en diciembre de 2011, la actriz adelgazó demasiado y cayó en exceso de sustancias, incluso tuvo que ir a rehabilitación donde permaneció dos meses.

Para que la mexicana no llegue a tales extremos, investigadores de la Universidad de Arizona sugieren recurrir a la “auto-compasión”, esto es, una combinación de amabilidad con uno mismo, un reconocimiento de la humanidad común y la capacidad de dejar que las emociones dolorosas pasen. Al hacerlo, se puede fomentar la resistencia y los resultados positivos ante el divorcio.

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Para comprobar esto, los investigadores estudiaron a 38 hombres y 67 mujeres con una edad promedio de 40 años que habían estado casados durante más de trece años y que se habían divorciado tres a cuatro meses antes, en promedio.

Al final, se encontró que los que tenían niveles más altos de compasión por sí mismos pudieron recuperarse más rápido del impacto emocional del divorcio. Estos hallazgos podrían resultar útiles para ayudar a las personas a afrontar mejor la desolación de la separación y el divorcio, sugirieron los elaboradores del estudio.

Otro aspecto que Fey también deberá considerar tiene que ver con su hija Isabella, de dos años, 11 meses. Se ha encontrado que miles de niños sufren el estrés del divorcio de sus padres cada año. La manera en que reaccionarán dependerá de su edad, personalidad y las circunstancias concretas del proceso de separación y divorcio.

Y aunque la pequeña cuente con una edad muy temprana, es importante fomentarle la confianza y el apoyo de ambas partes. Ayudarle a expresar sus sentimientos también es bueno para su desarrolló, según apunta la Fundación Nemours.

Asimismo, se recomienda llevarla en los próximos años a buscar un grupo de apoyo para asimilar este proceso de la mejor manera.

Como una forma saludable también se sugiere que los padres mantengan los conflictos, riñas y discusiones acaloradas que llegaran a presentarse al margen de los hijos. Explicale a tu hijo que a veces la forma de quererse de los adultos experimenta cambios o que usted y su pareja no pueden ponerse de acuerdo en cosas importantes y, por lo tanto, tienen que vivir separados.

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