Gareth Bale, con sobrecarga muscular
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Aunque el Real Madrid pagó una fortuna por sus servicios (100 millones de euros), también es de carne y hueso. El centrocampista galés Gareth Bale sufrió una sobrecarga muscular en el muslo izquierdo y su lesión está “pendiente de evolución”, así lo dio a conocer el club de fútbol español.
Crédito: WikimediaTras realizarle las pruebas médicas se confirmó lo que el futbolista Gareth Bale tanto temía: una sobrecarga muscular que sufrió durante el calentamiento del partido de liga del Real Madrid ante el Getafe.
Por esta razón Bale tuvo que ceder su lugar en el terreno de juego a Isco Alarcón y dejó pasar la oportunidad de debutar en el estadio Santiago Bernabéu, la casa del cuadro merengue.
Hasta el momento se desconoce el tiempo que estará fuera de las canchas, pero según el club, se descartó que la lesión del galés sea de gravedad y añadió que si no jugó contra el Getafe fue solo por precaución.
Existen muchos factores individuales que predisponen a lesiones más que otras. La sobrecarga puede estar dada por la intensidad usada al ejercitarnos.
En el caso de los deportistas profesionales, como Bale, se da por el uso excesivo de un músculo o articulación, esto quiere decir, la realización de movimientos repetitivos, que involucran los mismos grupos musculares y no permiten su correcto descanso y recuperación.
Cada vez que los músculos se someten a un esfuerzo, algunas fibras se lesionan y otras usan el glucógeno reservado. Debido a que cada vez son menos las fibras sanas que responden al esfuerzo físico, las probabilidades de lesionarse si el ejercicio exige mucha intensidad es superior.
La buena noticia para el centrocampista merengue es que una sobrecarga tiene su manera de prevención y para ello no hay que olvidar el calentamiento previo al esfuerzo, realizar estiramientos y un adecuado proceso de vuelta a la calma.
Asimismo, permitir la recuperación de cada músculo con un correcto descanso, es favorable para prevenir las lesiones por sobrecarga, al igual que variar las intensidades y movimientos en cada entrenamiento.
Además de la sobrecargas musculares, existen otros problemas que aterran a los jugadores. Los tobillos son unas de las zonas más vulnerables, en donde se pueden presentar esguinces, que ocurren cuando hay un estiramiento exagerado de los ligamentos.
Otra de las áreas del cuerpo más afectadas son las rodillas, las cuales pueden sufrir graves daños en los ligamentos al momento de los impactos o puede causar rupturas en el cartílago.
Las pantorrillas también se lesionan, sobretodo, cuando se hace un esfuerzo extremo o se estiran severamente.
De la misma manera, el tendón de Aquiles al estirarse demasiado se puede desgarrar por completo manifestándose como un dolor agudo en el tobillo que deja hasta el más valiente en el piso.
La recuperación ante este tipo de situaciones depende generalmente de la gravedad de la lesión. Una lesión leve puede tardar entre una y dos semanas en sanar mientras que una grave puede llevar más de seis meses.
Con información de la Biblioteca Nacional de Medicina.
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