No les fue fácil admitir su homosexualidad
¿Quién dijo que declararse gay era fácil? Ya sea por problemas de aceptación propios o por parte de la sociedad, para muchas personas admitir su orientación sexual simplemente es una misión imposible.
Crédito: Getty Images/ MezcalentSalir del clóset no es nada sencillo. Varios artistas han visto la vida "color de hormiga" antes, durante y después de destapar su homosexualidad. Ejemplos sobran: Christian Chávez, Sebastián Ligarde o Ellen Page son algunos de ellos.
Para el ex integrante de RBD Christian Chávez gritar a los cuatro vientos sus preferencias de sexo le costó ser excluido por varios medios de comunicación, razón por la que en 2010 hizo una denuncia contra estos hechos. En alguna ocasión manifestó que México, el lugar donde nació, “es un país de homofobia”.
En tanto, el actor Sebastián Ligarde, quien en enero de 2014 se unió en matrimonio con su pareja, ha notado un clima nada apto para los gays. “He visto muchos suicidios en adolescentes y al mismo tiempo, actos de valor, los cuales necesitamos que se tripliquen para que nadie más sea abusado”, comentó en alguna ocasión.
Incluso, aquellos personajes que ahora son unas grandes celebridades también pasaron por el mismo vía crucis. Tal es el caso de la comunicadora Ellen Degeneres quien se enfrentó a la homofobia en cuanto salió del armario en 1997. En la actualidad Ellen se encuentra casada con la actriz Portia Rossi.
Neil Patrick Harris también se las vio “negras” cuando admitió públicamente que era gay. En una entrevista con la revista People en noviembre de 2006 admitió su fascinación hacia los hombres e incluso dijo que junto a David, su novio, son padres de unos mellizos, gracias a un vientre de alquiler.
Y es que retar al “qué dirán” y asumir abiertamente una postura gay es algo que puede llevar muchos tiempo. A la edad de 50 años, Jodie Foster reveló su secreto mejor guardado. Durante la ceremonia de premiación de los Globos de Oro 2013, la actriz confesó que es lesbiana.
La triste realidad
Desafortunadamente, en algunos casos no todo es miel sobre hojuelas. Para el británico Rupert Everett, quien se popularizó en la serie My Best Friend’s Wedding, el decir “soy gay” significó un derrumbe para su carrera artística, según dio a conocer.
Una parte esencial que hay que comprender de este tema apunta a que los seres humanos no pueden elegir ser gay o heterosexuales. De acuerdo con la Asociación Americana de Psicología (APA), en la mayoría de las personas, la orientación sexual surge a principios de la adolescencia sin tener ninguna experiencia sexual previa.
Además, la homosexualidad no se trata de un trastorno mental. Aunque en años pasados el tema figuraba en este campo semántico, varios investigadores han demostrado que no hay asociación alguna, ni tampoco se trata de un problema de salud mental.
Existen muchos prejuicios hacia la temática gay. Uno de ellos, el más polémico quizás, tiene que ver con su rol como papás. Sobre esto, la APA asegura que en los estudios donde se comparan niños criados con padres heterosexuales y homosexuales no hay diferencia en el desarrollo entre los niños.
Desafortunadamente el tema del prejuicio, la indiferencia, el odio y falta de aceptación termina matando al público gay. “Todas estas manifestaciones afectan el bienestar de las personas, familias y las comunidades; causan sufrimiento y estrés y crean situaciones de riesgo”, advierte la Organización Panamericana de la Salud.
En busca de la no discriminación
Los últimos meses han sido clave en los temas de discriminación. Apenas en noviembre de 2013 el Senado de EU aprobó una ley que busca garantizar los derechos laborales de los trabajadores gay, pues se han encontrado varios casos en donde las personas son despedidas luego de conocerse su orientación sexual.
Más para leer:
© 2024 Pan-American Life