Droga para el corazón previene el racismo
Un medicamento que combate la hipertensión y controla los latidos cardíacos tendría como efecto secundario combatir las ideas racistas. ¿Será esta droga una cura contra la discriminación?
Un medicamento utilizado para controlar la hipertensión y regular los latidos cardíacos podría tener un efecto secundario muy singular: reducir las ideas racistas de los pacientes, según halló un estudio llevado a cabo por investigadores ingleses.
“Observamos que el propranolol, un medicamento utilizado para controlar la ansiedad, la hipertensión y otros síntomas cardíacos reduciría los prejuicios racistas en los individuos”, explica la Dra. Sylvia Terbeck, psicóloga de la Universidad de Oxford y directora del estudio.
De acuerdo con la Dra. Terbeck, el propranolol influiría en diversas zonas del cerebro con el objetivo de reducir la ansiedad y de controlar los movimiento inconscientes del corazón. Su efecto “anti-racista” se debería a que una de las áreas en las que influye es el área del miedo: “La discriminación está determinada en gran parte por el miedo que tiene un individuo ante algo o alguien que no conoce bien; reduciendo este miedo, podría reducirse la reacción racista”, destaca.
Para el estudio se tomaron 36 voluntarios, a quienes se les pidió responder un test de Asociaciones Raciales Implícitas (IAT), el cual tiene como propósito medir las ideas racistas inconscientes del individuo.
El IAT consiste, en parte, en proyectar sobre una pantalla rostros de personas de diferentes grupos étnicos, y cada rostro debe ser evaluado por el voluntario con una palabra positiva o negativa. “El objetivo es que el participante evalúe lo más rápido posible el rostro de la pantalla, antes de que su mente consciente pueda reaccionar, de este modo se obtiene una respuesta emocional automática”, asegura la Dra. Terbeck.
Dos horas después de la prueba psicológica, a un grupo de voluntarios se le dio propranolol, mientras el otro tomaba un placebo, y se repitió el IAT.
Los investigadores observaron que, dentro del grupo que había tomado el propranolol, más del 30 por ciento presentaba resultados "negativos" en el IAT, es decir, manifestaban menos ideas racistas subconscientes; en el caso del grupo placebo, no se observó ningún cambio.
No obstante, no se registró ninguna mejoría con respecto a otros tipos de discriminación, por ejemplo, religiosa o relativa a la preferencia sexual.
Por su parte, el Dr. Julian Savulescu, coautor del estudio, considera que estos hallazgos conllevan serias cuestiones éticas.
Para el Dr. Savulescu, "Lo primero que nos preguntamos es si podríamos combatir los prejuicios racistas a través de drogas, pero debemos pensar también si eso sería bueno, pues implicaría de algún modo controlar el pensamiento del individuo; además, los intentos para modificar las ideas morales de la gente con drogas y otros procedimientos tienen un oscuro pasado".
El 21 de marzo, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) conmemora el Día Internacional de la Eliminación de la Discriminación Racial.
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