FDA aprueba remedio para la esquizofrenia
La Administración de Drogas y Alimentos de Estados Unidos, conocida como FDA, aprobó una nueva medicina para tratar la esquizofrenia en adultos y como complemento de medicaciones antidepresivas en casos de depresión grave. En la etapa experimental, los pacientes han mostrado mejoría en los síntomas de ambas patologías.
El nuevo medicamento podrá utilizarse para tratar la depresión como complemento de los antidepresivos y para mitigar los síntomas de la esquizofrenia.
“La esquizofrenia y la depresión mayor o grave son dos enfermedades mentales que incapacitan a la persona de realizar sus actividades cotidianas", dijo el Doctor Mitchell Mathis, M.D, director de la División de Productos Psiquiátricos de la FDA. "Las medicaciones afectan a todos de una forma distinta por lo que es muy importante contar con una variedad de opciones de tratamiento para los pacientes que padecen una enfermedad mental", agregó.
La efectividad de la nueva droga, conocida como Rexulti fue evaluada en 1310 participantes esquizofrénicos que participaron de seis semanas de pruebas clínicas y fueron comparados con un grupo control que tomaba un placebo. Los resultados mostraron que hubo una reducción de los síntomas de la enfermedad mucho mayor en el grupo que tomó el medicamento activo.
Como tratamiento complementario para la depresión mayor, el Rexulti fue evaluado en dos períodos de seis semanas cada uno en 1046 pacientes diagnosticados con depresión. Los pacientes fueron divididos en dos grupos: uno tomaba la nueva droga combinada con un antidepresivo y el grupo control que tomaba en antidepresivo pero combinado con un placebo o medicamento inactivo.
Como conclusión, los pacientes que tomaron la nueva droga reportaron menor cantidad de síntomas de depresión
Uno de las advertencias que salieron publicadas es que la medicación aprobada debe tener un recuadro que alerte a los profesionales de la salud sobre un aumento del riesgo de muerte asociado con el uso de esta medicación para tratar pacientes mayores que padecen psicosis pero derivada de una demencia.
También, los profesionales de la salud, advierte la FDA, deben ser conscientes de que esta medicación puede incrementar los pensamientos suicidas en niños, adolescentes y adultos jóvenes que toman también antidepresivos.
Uno de los efectos secundarios más comunes de esta nueva droga es el aumento de peso, así como también una sensación de inquietud, como una necesidad de moverse.
Dos enfermedades que incapacitan
La esquizofrenia es un trastorno mental grave que de alguna forma desconecta a la persona de la realidad, la hace oír voces o ver cosas que no son reales. Es una enfermedad que abarca lo que comúnmente llamamos locura.
Los científicos no están seguros sobre qué causa la esquizofrenia, pero el trastorno puede presentarse en varias generaciones de una misma familia. La estructura o la química cerebral de una persona y el ambiente en que vive pueden también contribuir al desarrollo de la esquizofrenia. En Estados Unidos, aproximadamente 1 de cada 100 personas tiene esquizofrenia.
Aunque los síntomas de la esquizofrenia pueden variar de una persona a otra, los más frecuentes son las alucinaciones (ver u oír cosas que no existen) y los delirios (creer cosas que son irracionales o no son ciertas).
Algunos delirios giran en torno a la idea de que otros pueden leerle la mente, la creencia de que otros intentan controlar su mente, o la preocupación constante de que otros estén tratando de hacerle daño.
Los pacientes esquizofrénicos también presentan dificultad para comunicarse y decir cosas que no tienen sentido, problemas de movimiento: repetir movimientos constantemente o no moverse en absoluto, dificultad para mostrar las emociones (hablar con voz inexpresiva y no mostrar expresiones faciales, como sonreír o fruncir el ceño), dificultad para interactuar con otras personas, dificultad para prestar atención y tomar decisiones y pensamientos suicidas.
El trastorno depresivo grave, también llamado depresión grave o mayor, se caracteriza por una combinación de síntomas que interfieren con la capacidad para trabajar, dormir, estudiar, comer, y disfrutar de las actividades que antes resultaban placenteras. La depresión grave incapacita a la persona y le impide desenvolverse con normalidad. Un episodio de depresión grave puede ocurrir solo una vez en el curso de vida de una persona, pero mayormente, recurre durante toda su vida.
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