La congresista Giffords comienza su rehabilitación

Todavía los médicos deben evaluar cuánto puede ver y si será capaz de volver a hablar. Lo que sí saben es que uno de sus grandes desafíos es aprender a pensar y a organizar su mente nuevamente. Giffords mueve sus brazos y piernas, pero también están analizando la fortaleza que tiene especialmente en la parte derecha de su cuerpo.

Los médicos que la atienden actúan en base a nuevos estudios científicos, que indican que cuanto antes se empiece la rehabilitación, más eficaz va a ser la recuperación.

Giffords pasará las próximas semanas en el TIRR Memorial Hermann Hospital de Houston, ciudad en donde su esposo, Mark Kelly, trabaja para la NASA como astronauta. En un comunicado de prensa, Kelly agradeció el trabajo del equipo médico del University Medical Center de Tucson, quienes “lograron estabilizar a mi esposa al punto de que pronto pasará a la etapa de rehabilitación”.

La recuperación de la congresista ha sorprendido a familiares y médicos: en apenas unos días, fue desconectada del respirador artificial y abrió los ojos. Los primeros días, los médicos le indujeron a un estado de coma, para evitar que su cerebro se cansara y bajara la inflamación que provocó el impacto de la bala.

En una increíble estrategia médica, también le sacaron parte de su cráneo para que el cerebro inflamado tuviera más espacio y lo “guardaron” para recolocárselo más adelante.

En la última década, ha cambiado por completo el criterio sobre estos tratamientos. Antes, los pacientes permanecían meses en el hospital. Ahora es lo opuesto y, dicen expertos, lo ideal es actuar rápido. El 92 por ciento de las personas que reciben este tipo de balazos, muere. Giffords fue baleada por Jared Lee Loughner, el sábado 8, en una masacre en la que murieron seis personas.

Dos claves: su capacidad de entender y de hablar, hasta ahora dos misterios.

El esposo de Giffords dijo que habían evaluado centros de rehabilitación en Washington, Nueva York y Chicago, pero el de Houston tiene una gran prestigio en tratar casos de traumatismos graves, en los que la bala penetró profundamente. Además, Kelly explicó que Houston es su hogar y allí tienen familia y apoyo.

El próximo vuelo espacial de Kelly es en abril, pero todo dependerá de la recuperación de su esposa.

El nuevo lugar en donde estará la congresista es un centro de rehabilitación de 116 camas, que recibe fondos federales para estudios a largo plazo con pacientes que han sufrido traumas severos. Giffords pasará allí entre cinco y ocho semanas. Luego, si todo va bien, quizás siga la recuperación como paciente externo en su hogar.

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