Los autobronceantes podrían producir obesidad y diabetes

Los bronceadores artificiales contienen una sustancia química incolora llamada ftalato y se demostró que su presencia en la sangre duplica las probabilidades de desarrollar diabetes. Esta información surge de datos obtenidos en un estudio que se realizó a 1,000 personas, de las cuales 119 tuvieron diabetes y otras 88  tenían antecedentes de la enfermedad.

Luego de considerar los factores causantes de diabetes tipo 2 - obesidad, tabaquismo y alto colesterol – se encontró que las personas con concentraciones más altas de ftalatos en su sangre eran mas propensas a desarrollar resistencia a la insulina

El ftalato es un químico ampliamente utilizado en la industria cosmética por sus propiedades gelificantes y también para fabricar productos de limpieza, envases y objetos plásticos.

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Sin embargo, no es la sustancia que da color en los bronceadores sin sol sino la eritrulosa, que reacciona con los aminoácidos de la queratina de las capas externas de la piel. La eritrulosa no es un colorante, sino que oscurece la piel por una reacción química, como ocurre con la oxidación de una manzana en contacto con el aire.

Los nuevos estudios sugieren que los ftalatos podrían tener un impacto negativo en la salud, haciendo que el cuerpo acumule más grasa y  se haga más resistente a la insulina. En California se prohibió su uso en juguetes y productos para niños menores de 3 años (patitos, chupetes, mordillos) ya que son compuestos químicos hechos a base de petróleo.

En la industria cosmética se lo utiliza en perfumes, productos capilares y para las uñas, cremas para afeitar, jabones, cremas, cosméticos y varios otros productos.  Se absorbe en envase y en producto, e ingresa en la corriente sanguínea a través de la piel

Algunos científicos opinan que esto es una exageración de los ambientalistas, que omiten informar que los mencionados efectos peligrosos o negativos solo ocurren a muy altas concentraciones y en determinados animales de experimentación.

De todos modos, la investigadora Mónica Lind, profesora de medicina ambiental de la Universidad Uppsala, en Suecia dijo: 'Los contaminantes que contienen los ftalatos provocan obesidad en las personas y también descubrimos que las hace propensas a la diabetes. Por ello es necesario hacer pruebas en estos productos”.